Fidias nació poco después de la batalla de Maratón, hacia el 490 a. C. y se encuadra en la etapa conocida como el "primer clasicismo griego"; diseñó las estatuas de la diosa Atenea en la Acrópolis de Atenas y la colosal estatua sentada de Zeus en Olimpia. También fue esculpido el Friso del Partenón bajo su dirección con ayuda de sus discípulos, pero se cree que Júpiter, Hera y algunos otros dioses fueron esculpidos por la propia mano de este gran artista. Las obras Atenienses fueron aparentemente encargo de Pericles en el 447 a. C.
Llevó las esculturas a su cota más alta de perfección y armonía. Sobresalió tanto en la escultura exenta como en el relieve.
La primera obra que se conoce de él es la Atenea Lemnia, obra destinada a la Acrópolis de Atenas; pero la obra que le dio la fama fue la Atenea Partenos, obra criselefantina que representa a Atenea en una estatua de 9 metros de altura como una diosa guerrera, con escudo y casco, preparada para la defensa de la ciudad (la obra está perdida, pero se conoce a partir de descripciones y reproducciones).
El Friso del Partenón, el cuál le regaló su fama ya en su tiempo y sigue perdurando hasta los nuestros, es un friso en bajorrelieve de unos ciento sesenta metros de longitud.
Pero también hizo más trabajos escultóricos en el Partenón, como dos frontones decorados con figuras exentas y noventa y dos metopas de altorrelieve.
En el templo de Zeus, de Olimpia, Fidias ejecutó otra estatua criselefantina, de diez metros de altura de Zeus. Esta obra es conocida por la descripción de Pausanias, por algunas reproducciones monetarias y por réplicas posteriores.
A pesar de ser considerado como uno de los fundadores y de los mejores exponentes del Alto clasicismo en la escultura, es curioso que no se sepa mucho más de su vida más que estuvo marcada por la amistad con Pericles, que lo hizo finalmente abandonar Atenas a causa de un proceso contra él que tenía como objetivo encubierto al propio jefe del partido demócrata.
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