Los reinos del Inframundo

El inframundo eran los distintos territorios que se situaban debajo de la tierra o más allá del horizonte. Era un lugar poco luminoso y siniestro, y aquí era a dónde paraban los muertos después de haber abandonado la vida.

El reino del inframundo estaba compuesto por cuatro reinos, estos eran el Érebo, el Tátaro y los Campos Elíseos y las Islas de los Bienaventurados.

• El Érebo era el lugar dónde entraban las alamas de aquellos que perdían la vida. Allí les esperaba Caronte, que los porteaba cruzando el rió Aqueronte, dónde las alamas hacían su último viaje
• El Tártaro era una gran prisión fortificaba en la que se condenaba y a las alamas que habían tenido un compartimiento indigno, aunque en un principio servía solo como calabozo de los antiguos titanes.
• Los Campos Elíseos era el lugar dónde paraban las alamas de los que habían tenido un comportamiento digno y virtuoso. Los habitantes podían regresar al mundo de los vivos, pero muy pocos de ellos lo hacían.
• Islas de los Bienaventurados, también llamadas Islas Elíseas, eran el hogar de los grandes héroes míticos, cómo Aquiles, Diomedes y Peleo.

                        

Todos estos reinos estaban gobernados por el dios griego Hades, el gran dios del inframundo, hijo de los Titanes Cronos y Rea. Hades era considerado un dios justo, a pesar de que muchas veces se cree que es un dios fiero. 

Su tarea en el Inframundo consistía en que aquellos que entraran en su reino no saliesen de él. Por eso, contaba con Cerebro, su perro, un monstruo de tres cabezas, que guardaba la puerta del Inframundo.