sábado, 1 de diciembre de 2012

Sejano

¡Hola chicos!
Haciendo un trabajo para clase de Latín sobre el Imperio Romano descubrí la existencia de un montón de curiosidades sobre los emperadores, su familia y sus amigos. Hubo una historia en especial que me pareció muy interesante, pero como el trabajo quedaba muy largo, decidí que la suprimiría y haría una entrada para  que todos pudierais conocerla, así que aquí está.
Supongo que a todos os sonará el nombre de Tiberio, para los que no fue el segundo emperador de Roma. Subió al poder con 56 años (año 14 d. C ), tras la muerte de César Augusto. A Tiberio no le gustaba los aduladores, ni que el pueblo lo tratase como a un dios. Los romanos les desagradaba ya que estaban acostumbrados a adorar a los emperadores construyendo templo y estatuas.
El pueblo temía al emperador que contestaba con desprecio y se volvía cada día mas misántropo. El único que consiguió ganarse su confianza fue el protagonista de la historia que quiero contar, que era el capitán de su guardia. Su nombre era Sejano y logró hacerse indispensable para el emperador.Este personaje fue ascendiendo poco a poco en la escala social y lo único que se interponía entre el y el trono era Druso, el hijo del emperador. He encontrado dos teorías, una dice que Sejano mando matar a su rival y otra que dice que lo mató el. Pasara una cosa o otra lo importante es que acabó muerto.
Tiberio no empezó a desconfiar de Sejano hasta unos años mas tarde, cuando tuvo pruebas en su contra y  decidió a castigarlo. No se atrevió ha hacerlo directamente por miedo a una rebelión de sus seguidores.
De vez en cuando le reprochaba su conducta y el traidor perdió seguridad. Tiberio lo calmó prometiéndole un puesto de tribuno.
Un día le anunciaron que el nombramiento acababa de concretarse en Capri, donde se hallaba el emperador. Se le presento un oficial de la guardia con una carta de Tiberio. Muy satisfecho, Sejano cayó en la trampa y entró en la sala de juntas del Senado. La carta era muy larga y sólo en las últimas líneas se comprendía que había sido acusado de alta traición y debía ser detenido en el acto.
Ese mismo día, fue condenado a muerte y su cadáver fue entregado a la venganza del pueblo, quien lo arrastro tres días por la ciudad de Roma hasta arrojarlo al río Tíber.Los parientes y amigos de Sejano fueron asesinados y su esposa le escribió a Tiberio una carta en la que confesaba que su marido había sido el causante de la muerte del heredero del trono. Después la mujer se suicidó.
La manera de castigar ha cambiado mucho a lo largo de la historia pero las razones por las que se castiga no tanto. Espero que os haya gustado la historia y no haberos aburrido mucho.Hasta la próxima entrada y creo que va a ser muy pronto pues, en mi cabeza ya da vueltas alguna que otra idea.

3 comentarios:

  1. Me gusta tu entrada Maria:) no sabia yo nada de ese tal Sejano! Muy bien^^

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  2. Muy interesante María, tengo que admitir que no conocía esta historia.

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  3. Me encanta que un trabajo os lleve a otro:) Está muy bien que compartas con nosotros esta información sobre alguno de los personajes que tuvieron su importancia en la Historia y en pocas ocasiones nos acordamos de ellos.

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